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Elena Abraham fue nombrada Académica Correspondiente de la Academia Argentina de Ciencias del Ambiente
La investigadora del IADIZA ha orientado su trabajo al conocimiento de las potencialidades y restricciones de las tierras secas, desde una visión ambiental.
Elena María Abraham, investigadora principal -ad honorem- del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) fue nombrada Académica Correspondiente de la Academia Argentina de Ciencias del Ambiente.
Sobre su nombramiento, la científica expresó: “Me siento muy honrada. Esto no hubiera sido posible sin el permanente apoyo y el trabajo en equipo del Laboratorio de Desertificación y Ordenamiento Territorial del IADIZA”, donde Abraham presta funciones, y agregó: “Desde esta posición en la Academia Argentina de Ciencias del Ambiente, espero continuar aportando al conocimiento de los problemas y demandas ambientales de las tierras secas de Argentina y de América Latina, un tema importante que aún requiere muchas contribuciones para lograr acciones efectivas de prevención, rehabilitación y control, y sobre todo aportar a la sensibilización de tomadores de decisión, y de la población en general, sobre su trascendencia para el país”.
Abraham ha orientado su trabajo al conocimiento de las potencialidades y restricciones de las tierras secas, desde una visión ambiental. Se desempeñó como profesora universitaria en Ordenamiento Ambiental en la Universidad de Congreso de Mendoza, como directora del Instituto Argentino de Investigaciones de las Zonas Áridas (IADIZA, CONICET-UNCUYO-Gob. Mza) y del CONICET Mendoza, entre 2016 y 2021 y fue subsecretaria de medio ambiente del gobierno de Mendoza.
Actualmente, lidera un grupo interdisciplinario de investigación, ordenamiento y gestión de las tierras secas afectadas por desertificación y trabaja en el desarrollo de enfoques y metodologías integradas, participativas y multiescalares para la evaluación de la desertificación/degradación de tierras y en la generación de estrategias de desarrollo local para combatir esta problemática y facilitar la adaptación al cambio climático en poblaciones del desierto del Monte. Además, aplica estos conocimientos en procesos de ordenamiento territorial, habiendo participado de la formulación de distintas leyes sobre el tema y usos del suelo para la provincia de Mendoza.
Ha publicado más de doscientas contribuciones al conocimiento de las tierras secas. Fue miembro del Science & Policy Interfase (SPI) de la Convención para el Combate de la Desertificación de las Naciones Unidas, grupo del que participa como experta internacional. Es co-chair de la Desertnet International y miembro de la Comisión Directiva del Observatorio Nacional de Degradación de Tierras y Desertificación del CONICET. Entre los premios recibidos se destaca el reconocimiento del gobierno de Brasil, a través de su Ministerio de Ambiente, por sus relevantes contribuciones al desarrollo del conocimiento científico sobre la desertificación en América Latina.